Autores de nacionalidad china publicaron en la edición del 20 de junio del Clinical Cardiology los resultados de una investigación clínica que analizó las manifestaciones cardiovasculares en pacientes graves y críticos con COVID ‐19, que será comentada en la NOTICIA DEL DÍA*.
Señalan que la enfermedad producida por coranavirus 2019 (COVID ‐ 19), un brote de neumonía causada por el coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo severo (SARS ‐ CoV ‐ 2) en Wuhan en diciembre de 2019, se ha extendido rápidamente por toda China y otras regiones del mundo, incluida Europa , Estados Unidos, Japón, Australia y América.
Es una enfermedad muy contagiosa que afecta a múltiples órganos del cuerpo y las complicaciones reportadas incluyen neumonía, alteración de las funciones renales y hepáticas, lesiones cardíacas, deficiencia inmune celular y activación de la coagulación.
Se informa que alrededor del 12% de los pacientes sufrieron daño cardíaco. Sin embargo, las manifestaciones cardiovasculares después de la infección con COVID ‐ 19 no se han reportado sistémicamente.
Este estudio tuvo como objetivo explorar cómo COVID ‐ 19 afecta el sistema cardiovascular, incluido el miocardio, el sistema de conducción, la función cardíaca y la presión arterial, especialmente en casos graves y críticos, e identificar los posibles factores de riesgo que predicen su gravedad.
Por lo tanto, los autores partieron de la hipótesis que la infección por COVID-19 puede dar lugar a manifestaciones cardiovasculares que conducen a un peor resultado clínico.
Fueron incluidos cincuenta y cuatro pacientes graves y críticos con COVID ‐ 19 confirmados. Se analizaron los factores de riesgo presentes que predecían la posible gravedad de la evolución.
De los 54 pacientes (56,1 ± 13,5 años, 66,7% hombres) con COVID ‐ 19, 39 fueron diagnosticados como graves y 15 como casos críticos.
En casos críticos fueron significativamente mayores la aparición de diabetes, el nivel de dímero D, los marcadores inflamatorios y cardíacos.
La elevación de troponina I (TnI) se produjo en el 42,6% de todos los pacientes graves y críticos. Tres pacientes experimentaron hipotensión al ingreso y todos fueron diagnosticados como casos críticos en consecuencia.
Se encontró hipotensión en un caso grave y siete casos críticos durante la hospitalización. La taquicardia sinusal es el tipo más común de arritmia y se observó en 23 pacientes graves y en todos los pacientes críticos.
El bloqueo auriculoventricular y la taquicardia ventricular se observaron en pacientes críticos en la etapa final, mientras que la bradicardia y la fibrilación auricular fueron menos comunes.
Se observó derrame pericárdico leve en un caso grave y cinco casos críticos.
Tres casos críticos debutaron con un cuadro de insuficiencia cardíaca. La hipotensión durante el tratamiento, la lesión grave del miocardio y el derrame pericárdico fueron factores de riesgo independientes que predijeron el estado crítico de la infección por COVID-19.
Como conclusión, este estudio ha observado sistémicamente el impacto de COVID-19 en el sistema cardiovascular, incluido el compromiso miocárdico, la presión arterial, la aparición de arritmia y el impacto sobre la función cardíaca en casos graves y críticos.
El monitoreo de los signos vitales y la función cardíaca de los pacientes y la aplicación de posibles intervenciones, especialmente para aquellos con hipotensión durante el tratamiento, lesión grave del miocardio o derrame pericárdico, fueron de vital importancia.
* Chen, Q, Xu, L, Dai, Y, et al. Cardiovascular manifestations in severe and critical patients with COVID‐19. Clin Cardiol. 2020; 1– 7. https://doi.org/10.1002/clc.23384