Director General de CARDIOLATINA
17º Encuentro del FIAI – CARDIOLATINA, La Piedad de Miguel Ángel y la esperanza de Nietzsche
Mucho tiempo pasa feliz un hombre
y en una breve hora gime y duele,
o por linaje antiguo y afamado
brilla otro y al instante se oscurece.
Miguel Ängel Buonarotti
La Piedad representa el dolor de la Virgen María al sostener en sus brazos el cadáver de su hijo Jesucristo después del descendimiento de la cruz. Sin embargo su rostro se ve tranquilo.
¿Expresa la imagen el sentimiento que, hallándonos a finales de mayo embarga a este Editor no habiendo certezas sobre la realización de nuestro 17º Encuentro del FIAI?
Si en mayo, la sonrisa de Mona Lisa era la metáfora que prologaba el 16ª Encuentro a realizarse en el Congreso de SIAC de Punta Cana, La Piedad de Miguel Ängel corresponde al ¿olvido? de quienes diseñaron el Congreso Mundial de Arritmias para no haber tenido en cuenta al FIAI, tal como sucediera en los Congresos previos realizados en noviembre de los ocho años anteriores.
No será interpretada tal piedad como la acción de abstenerse de infligir un castigo a un adversario o al responsable de tamaño despropósito, porque no está en mente castigar, excepto que así se malinterprete el hecho que de todas formas, el 17º Encuentro se realizará si es necesario al margen del Congreso Mundial.
Y si antes de que este escrito tome forma, tal medida fuese revisada, nada cambiará el orden de estas palabras ya que en todo caso deberá darse a la Piedad el sentido bíblico de misericordia, que es otro de los que tiene.
Los Encuentros del FIAI fueron, -tanto los que se realizaron en el marco de los Congresos Argentinos de Arritmias como los que se efectuaron en Congresos de otros países-, de notable excelencia y fueron partícipes del éxito que lograron dichos eventos; es por ello que el 17º Encuentro será una realidad en noviembre de 2019, ya sea en el marco del Congreso, este año Mundial, y si esto no acontece en un escenario propio.
Merece comentario aparte, ya que de La Piedad se trata, hacer un comentario sobre los aranceles que rigen la inscripción al Congreso Mundial de Arritmias, similar a las inscripciones a otros congresos de estas características, para señalar que resultan absolutamente impiadosos, por lo menos a los ojos de este Editor.
Cifras entre 450 a 800 dólares por cada membresía resultan absolutamente exorbitantes y permiten colegir que por encima de la excelencia académica que se pretende para un evento internacional de este tipo, existe un monumental negocio.
Queda más claro también, el por qué propuestas de idéntico nivel académicoaunque infinitamente más económicas como son la realización de Congresos Virtuales a través de Internet, no logran concitar apoyos y son generalmente saboteadas.
Ya casi al borde de junio, cuando este Editorial tomará vida, una frase de Nietzsche resuena fuertemente cuál retumbo ya que dice que La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre.
Efectivamente, su presencia indica la falta de certeza.
Y tal es a esta hora la situación, ya que se abre una posibilidad de realizar el Encuentro en su marco natural: es posible que al elevar la voz y comenzar a esbozar a éste, sus frases tomaran vuelo y llegaran a oídos pertinentes que supieron escuchar.
Todavía queda un día para arribar a junio y finalizar la escritura de este Editorial.
Aún persiste la incerteza.
Y la frase de Nietzsche se entrelaza con la Piedad de Miguel Ángel.
