El crecimiento en el uso de metanfetamina en todo el mundo continúa presentando desafíos sociales y de atención médica cada vez mayores.
Con el aumento de su uso en una variedad de datos demográficos sociales, la miocardiopatía asociada a la metanfetamina (MA-CMP, por sus siglas en inglés) se ha convertido en una etiología de miocardiopatía cada vez más reconocida, particularmente entre los pacientes más jóvenes que acuden a los departamentos de emergencia con síntomas de insuficiencia cardíaca (IC) y se encuentra que tienen una disfunción ventricular recién detectada.
La consecuencia de este proceso patológico es el desarrollo de IC con fracción de eyección reducida (HFrEF) por dilatación ventricular grave y disfunción del ventrículo izquierdo (VI).
Esta entidad clínica ha aumentado sustancialmente en su reconocimiento e incidencia en los últimos 15 años con un aumento sustancial en las hospitalizaciones.
Aunque ha habido una serie de estudios observacionales de esta cohorte, la etiología compleja de MA-CMP sigue sin estar clara, y los hallazgos de resonancia magnética cardiovascular (RMC) aún no se han caracterizado.
La RMC es una modalidad de imagen cardíaca especializada comúnmente utilizada en la evaluación de la miocardiopatía con el potencial para la medición precisa del volumen biventricular, el cálculo de la fracción de eyección, la caracterización de tejidos y la detección de trombos intracardíacos.
Nuestro objetivo fue caracterizar las características clínicas y de CMR asociadas con MA-CMP.
Esto es de particular importancia ya que una carga significativa de MA-CMP puede ser reversible con una intervención temprana y abstinencia completa de droga
Se realizó un estudio de cohorte retrospectivo de RMC en un solo centro entre enero de 2015 y diciembre de 2020. Se identificaron 30 pacientes con MA-CMP que se habían sometido a RMC. MA-CMP se definió como aquellos con antecedentes de uso significativo de metanfetamina hospitalizados con insuficiencia cardíaca aguda descompensada (excluidas otras causas de miocardiopatía). Se realizó un análisis retrospectivo de las RMC índice de admisión.
Todos los estudios se realizaron en un escáner CMR de 1,5 T.
La edad media de los pacientes con MA-CMP fue de 43,7 ± 7,5 años y el 86,7 % eran hombres.
El volumen medio del ventrículo izquierdo (VI) obtenido en esta cohorte fue compatible con una dilatación grave del VI (volumen telediastólico del VI (334 ± 99 ml); volumen telesistólico del VI: 269 ± 98 ml), mientras que el ventrículo derecho (VD) el volumen indicó dilatación de moderada a grave (volumen telediastólico del VD: 272 ± 91 ml; volumen telesistólico del VD: 173 ± 82 ml).
La fracción de eyección del VI media (20,9 ± 9,2 %) indicó una disfunción grave del VI, y también se detectó una disfunción del VD de moderada a grave (fracción de eyección del VD: 29,4 ± 13,4 %).
Veintidós pacientes (73,3%) tenían realce tardío de gadolinio (LGE) miocárdico, de los cuales el 59,1% se localizaba en la pared media, todos ellos con afectación del septo interventricular. El 22,7% presentaba regiones localizadas de LGE subendocárdico en diversas localizaciones. El 2% tenía regiones transmurales de LGE que se ubicaban en los segmentos inferior e inferolateral. 6 pacientes (20%) tenían trombo intracardíaco (4 VI, 2 tanto VI como VD).
Las limitaciones de este estudio incluyen las debilidades obligatorias asociadas con un diseño observacional retrospectivo realizado a través de la revisión de registros médicos que pueden haber resultado en un grado de sesgo de selección.
Además, faltaba un grupo de control de miocardiopatía no isquémica que se decidió no incluir debido a la heterogeneidad de diversas etiologías de miocardiopatía no isquémica.
Las pruebas genéticas para la miocardiopatía dilatada familiar tampoco estaban disponibles en esta cohorte; sin embargo, no se identificó ninguna miocardiopatía familiar incluida en la población estudiada.
Los datos se recopilaron de una sola red de atención médica y es posible que no sean aplicables a otras poblaciones.
Sin embargo, esta limitación se compensa con las ventajas de este único centro terciario, incluida la uniformidad en la práctica clínica,
Una cohorte significativa de la población incluida también tenía antecedentes de abuso de alcohol (~ 40%).
Sin embargo, los pacientes incluidos fueron evaluados en la revisión de los registros médicos en cuanto a cuál era su droga predominante de abuso y dependencia.
En este estudio solo se incluyeron pacientes con abuso predominante de AM, pero el alcohol ciertamente puede haber contribuido al desarrollo de una miocardiopatía en aquellos con antecedentes de abuso de alcohol, lo que representa un factor de confusión potencial para los hallazgos informados.
Es importante destacar que no hubo una diferencia estadísticamente significativa en los volúmenes ventriculares de referencia en aquellos con abuso de alcohol previo, en comparación con aquellos que no lo hicieron.
La población seleccionada para esta cohorte tenía un historial significativo y prolongado de abuso de metanfetamina.
Sin embargo, la intensidad del uso de metanfetamina es difícil de cuantificar en esta población de pacientes, particularmente cuando los datos clínicos se recuperan retrospectivamente de la revisión de registros médicos electrónicos.
Por lo tanto, el estudio representa una población razonablemente heterogénea de usuarios de metanfetamina, con métodos y niveles de consumo variables.
Como conclusiones los autores indican que hasta donde se sabe, esta es la serie más grande de MA-CMP que se ha caracterizado con CMR; demostró que MA-CMP se asocia con dilatación biventricular significativa y disfunción sistólica, una alta incidencia de LGE y un 20% de incidencia de trombo intracardíaco, que a veces era biventricular.
La población MA-CMP poseía patrones heterogéneos de LGE detectados, observados con mayor frecuencia en la pared media y el tabique interventricular.
Los datos de seguimiento de esta cohorte revelaron que la abstinencia del uso de metanfetamina después del diagnóstico de MA-CMP se asoció con una mayor mejora en la FEVI.
Se requieren estudios futuros con cohortes más grandes, así como cohortes de pacientes ambulatorios, para corroborar estos hallazgos e investigar sus imágenes de seguimiento para una mayor recuperación de la función cardíaca.
* Stokes MB, Thoi F, Scherer DJ, Win KTH, Kaye DM, Teo KS, Sanders P. Cardiovascular magnetic resonance imaging characteristics in patients with methamphetamine-associated cardiomyopathy. J Cardiovasc Magn Reson. 2022 Dec 1;24(1):67. doi: 10.1186/s12968-022-00898-6. PMID: 36451214; PMCID: PMC9713956.