A sugerencia del colega Remberto Torres Molina, de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, destacado miembro del FIAI, la NOTICIA DEL DÍA de hoy se ocupará o intentará responder su pregunta: «¿El nivel de colesterol es un marcador pronóstico de enfermedad cardiovadcular?»
Para ello se comentará una reciente publicación* de autores de la Universidad de Missouri-Kansas City y de la Cleveland Clinic, que analiza la prevalencia de riesgo cardiovascular elevado (ASCVD por sus siglas en inglés) en adultos jóvenes de 30 a 49 años sin ASCVD o diabetes conocida, que realizó un análisis transversal de las encuestas Nacionales de Exámenes de Salud y Nutrición de EEUU (NHANES) 1999 a 2000 hasta 2011 a 2012..
Señalan los autores como introducción que las guías de manejo del colesterol de la ACC / AHA del año 2013 recomiendan el tamizaje de lípidos en todos los adultos mayores de 20 años para identificar aquellos con mayor riesgo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica y que las estatinas pueden ser consideradas en aquellos pacientes con riesgo elevado a 10 años (> 5%) o con un nivel de colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL-C) de 4,92 mmol / l (190 mg / dl) o mayor.
Para ello se plantearon como objetivo describir la prevalencia de riesgo elevado de ASCVD entre adultos no diabéticos menores de 50 años.
El riesgo de ASCVD a 10 años se estimó utilizando la calculadora de riesgos ASCVD de ACC / AHA de 2013**. Los participantes fueron subdivididos por edad, sexo y antecedentes de tabaquismo e hipertensión. Se estimaron los porcentajes de adultos en cada subgrupo con un riesgo de ASCVD a 10 años superior al 5% y de aquellos con un nivel de C-LDL de 4,92 mmol / l (190 mg / dl) o mayor. Los subgrupos de baja prevalencia se definieron como aquellos en los que podría descartarse una prevalencia mayor de 1% de riesgo cardiovascular elevado (es decir, el límite superior de confianza del 95% para la prevalencia era ≤1%).
En total, se incluyeron 9608 participantes de las encuestas que representan 67,9 millones de adultos, con aproximadamente la mitad (47,12%, lo que representa a 32 millones de adultos) formando parte de los subgrupos de baja prevalencia. En ausencia de tabaquismo o hipertensión, el 0,09% (95% IC, 0,02% a 0,35%) de los hombres adultos menores de 40 años y el 0,04% (CI, 0,0% a 0,26%) de las mujeres adultas menores de 50 años tenían un riesgo elevado de enfermedad aterosclerótica.
En términos generales entre todos los subgrupos, entre el 0% y el 75,9% de los participantes presentaron un mayor riesgo y el 2,9% (IC, 2,3% a 3,5%) tenía un nivel de C-LDL de 4,92 mmol / L (190 mg / dl) o mayor.
Una limitación considerada por los autores es que no se dispone de información sobre los resultados cardiovasculares de las personas consideradas.
Por lo tanto, -concluyen- en ausencia de factores de riesgo, la prevalencia del aumento del riesgo ASCVD es baja entre las mujeres menores de 50 años y los hombres menores de 40 años.
* Patel KK, Taksler GB, Hu B, Rothberg MB. Prevalence of Elevated Cardiovascular Risks in Young Adults: A Cross-sectional Analysis of National Health and Nutrition Examination Surveys. Ann Intern Med. 2017 Jun 20;166(12):876-882. doi: 10.7326/M16-2052. Epub 2017 May 16.