30.03.2020

COVID 19 y coagulopatía por consumo

Investigadores del Hospital Tongji, del Tongji Medical College, Universidad de Ciencia y Tecnología de Huazhong, Wuhan, Hubei, R.P. China, acaban de publicar en la edición del 27 de marzo del Journal of Thrombosis and Haemostasis sus conclusiones acerca del tratamiento anticoagulante indicado en pacientes con enfermedad grave por coronavirus 2019 con coagulopatía concluyendo que su indicación se asocia con una disminución de la mortalidad*.

Señalan que tal como estudios recientes describieron, la enfermedad grave por coronavirus 2019 (COVID-19) es comúnmente complicada con coagulación intravascular diseminada (DIC por sus siglas en inglés) que puede existir en la mayoría de las muertes y sus respectivos estudios necrópsicos.

Asimismo manifiestan que debido a la evidencia de infección viral y disfunción respiratoria, muchos pacientes con COVID-19 grave cumplen con las terceras definiciones de consenso internacional para sepsis (sepsis-3).

Además, el reposo en cama a largo plazo y la probabilidad de recibir tratamiento hormonal también aumentan el riesgo de tromboembolismo venoso (TEV) en aquéllos pacientes con COVID-19 grave.

Por estas razones, la aplicación activa de anticoagulantes (como la heparina) para pacientes con COVID-19 grave ha sido recomendada por algún consenso de expertos en China, sin embargo, su eficacia aún no se ha validado.

La Sociedad Internacional de Trombosis y Hemostasia (ISTH) ha propuesto una nueva categoría que identifica una fase anterior de DIC asociada a sepsis, llamada «coagulopatía inducida por sepsis» (SIC por sus siglas en inglés); los pacientes que cumplen con los criterios de diagnóstico de SIC se benefician de la terapia anticoagulante.

Tal puntuación incluye el conteo de plaquetas, el RIN y los órganos involucrados en la coagulopatía

El estudio realizado por los médicos de Wuhan tuvo como objetivo validar la utilidad de la puntuación SIC y otros parámetros de coagulación, en la detección de pacientes que pueden beneficiarse del anticoagulante a través del análisis retrospectivo.

A tales efectos, los resultados de la coagulación y los medicamentos de pacientes consecutivos clasificados como COVID-19 grave en el hospital de Tongji se analizaron retrospectivamente.

Se comparó la mortalidad a 28 días entre los usuarios de heparina y los no usuarios, también en diferentes riesgos de coagulopatía que se estratificó por el puntaje de coagulopatía inducida por sepsis (SIC) o el resultado del dímero D.

Hubo 449 pacientes con COVID-19 grave inscritos en el estudio, 99 de ellos recibieron heparina (principalmente con heparina de bajo peso molecular, HBPM) durante 7 días o más.

El dímero D, el tiempo de protrombina y la edad fueron positivos, y el recuento de plaquetas fue negativo, correlacionado con la mortalidad a los 28 días en el análisis multivariado.

No se encontraron diferencias en la mortalidad a los 28 días entre los usuarios de heparina y los no usuarios (30.3% vs 29.7%, P = 0.910).

Pero la mortalidad a los 28 días de los usuarios de heparina fue menor que la de los no usuarios en pacientes con puntaje SIC ≥4 (40.0% vs 64.2%, P = 0.029), o dímero D> 6 veces el límite superior normal (32.8% vs 52.4% , P = 0.017).

Como conclusiones de lo observado, los autores afirman que la terapia anticoagulante, principalmente con HBPM parece estar asociada con un mejor pronóstico en pacientes con COVID-19 graves que cumplen con los criterios de SIC o con dímero D marcadamente elevado.

* Tang N, Bai H, Chen X, Gong J, Li D, Sun Z. Anticoagulant treatment is associated with decreased mortality in severe coronavirusdisease 2019 patients with coagulopathy.J Thromb Haemost. 2020 Mar 27. doi: 10.1111/jth.14817. [Epub ahead of print]

Auspicios Institucionales
  • Sociedad Argentina de Cardiología
  • Federación Argentina de Cardiología
  • SIAC
  • SADEC
  • Asociación Argentina de Cardiología
  • Latin American Heart Rhythm Society
  • Fundación Barceló - Facultad de Medicina