En el JAHA del 7 de febrero último fue publicada una interesantísima investigación de autores japoneses que se propusieron analizar la importancia del diagnóstico de espasmo coronario en pacientes con síndrome de repolarización precoz*.
Plantean los autores que para disipar todo tipo de dudas definieron el síndrome de repolarización precoz (ERS por sus siglas en inglés) como la presencia de una onda J inferolateral después de la resucitación de la fibrilación ventricular idiopática (FV), en ausencia de otras causas de paro cardíaco, como la enfermedad arterial coronaria. Señalemos que las manifestaciones electrocardiográficas de repolarización precoz en cara inferior constituyan un signo de eventual malignidad.
Asimismo, comentan que el espasmo de la arteria coronaria (CAS por sus siglas en inglés) es un proceso funcional que puede causar FV en pacientes sin cardiopatía estructural cuya prevalencia en pacientes resucitados por paro cardiopulmonar oscila entre 3,3% y 8,6%.
Se sabe que la CAS puede inducir arritmias ventriculares fatales sin síntomas aparentes y que además, la onda J inferolateral se ha asociado con una aumento del riesgo de arritmias ventriculares fatales en pacientes con CAS.
Esto indica que CAS silencioso (es decir, CAS sin ningún síntoma previo) puede haber estado presente en casos de ERS previamente informados como tales.
En estudios previos de ERS, el diagnóstico de CAS fue limitado, determinado sobre la base de la presencia de síntomas y hallazgos de la angiografía coronaria (CAG), sin que se realizara una prueba de provocación de espasmo.
En ese sentido, comentan que en un estudio multicéntrico en el que participaron pacientes con ERS, se realizó una prueba de provocación de espasmo en solo 19 de 122 pacientes (16%).
El manejo clínico de CAS y ERS es diferente; por lo tanto, es importante diferenciar las 2 condiciones. Sin embargo, la incidencia de CAS (en particular, CAS silenciosa) entre pacientes con posible ERS (es decir, VF idiopática y onda J inferolateral) sigue siendo desconocida.
Por lo tanto este estudio que incluyó a 34 pacientes con FV idiopática y onda J inferolateral investigó la importancia del diagnóstico CAS y evaluó la incidencia de CAS silente en pacientes con posible ERS (es decir, fibrilación ventricular idiopática [FV] y onda J inferolateral).
Trece pacientes (38%) fueron diagnosticados con CAS en base a una angiografía coronaria con prueba de provocación de espasmo (n = 8) y documentación de elevación espontánea del ST (n = 5).
De los 13 pacientes con CAS, 5 (38%) no experimentaron síntomas en el precordio antes y durante la FV, y se les diagnosticó una CAS silenciosa.
Los 21 pacientes restantes (62%), con un resultado de prueba de provocación negativa y ausencia de síntomas en el pecho, se consideraron con ERS.
Durante los 92 meses de seguimiento, los pacientes con CAS que recibían tratamiento médico apropiado con fármacos antianginosos mostraron un resultado favorable.
Por el contrario, 4 de 21 pacientes con ERS (19%) tuvieron recurrencias de FV. El uso de monoterapia o terapia de combinación, que consiste en quinidina, cilostazol y bepridil, en los 4 pacientes con ERS, fue eficaz en la supresión de la FV.
Estas observaciones permiten concluir que aproximadamente el 40% de los pacientes con CAS con FV documentada y onda J inferolateral no experimentaron síntomas anginosos en la primera FV, y podrían haber sido diagnosticados erróneamente con ERS.
El uso de la prueba de provocación del espasmo se considera esencial para diferenciar a los pacientes para un tratamiento médico óptimo y apropiado en este tipo de pacientes.
* Kamakura T, Wada M, Ishibashi K, Inoue YY, Miyamoto K, Okamura H, Nagase S, Noda T, Aiba T, Yasuda S, Shimizu W, Kamakura S, Kusano K. Significance of Coronary Artery Spasm Diagnosis in Patients With Early Repolarization Syndrome. J Am Heart Assoc. 2018 Feb 7;7(4). pii: e007942. doi: 10.1161/JAHA.117.007942.