Médicos de India y EEUU que realizaron una revisión de la literatura investigado el tema de la pirexia que desenmascara el síndrome de Brugada publicaron sus resultados y conclusiones En la edición de febrero de 2022 de Cureus*; la NOTICIA DEL DÍA de hoy dará cuenta de aquéllos.
Plantean en la introducción del artículo que el Síndrome de Brugada (BRS) es un síndrome de arritmia cardíaca hereditaria con un modo de herencia poligénico con expresión variable y muchas variantes genéticas comunes y raras.
Causa un mayor riesgo de taquiarritmia ventricular y muerte cardíaca súbita (SCD por sus siglas en inglés).
Se caracteriza por un patrón de ECG típico con un pseudobloqueo de rama derecha y elevación persistente del segmento ST en las derivaciones precordiales derechas (V1-V3), descrito por primera vez en 1992 por un informe de los médicos españoles Pedro y Joseph Brugada quienes identificaron el patrón en ocho personas que fueron resucitadas de SCD causadas por el desarrollo de fibrilación ventricular (VF).
Se caracterizó inicialmente como un bloqueo de rama derecha, elevación persistente del segmento ST y síndrome de MS, y luego se le otorgó el nombre de Síndrome de Brugada (BRS) en reconocimiento a sus descubridores.
Se produce en los corazones afectados, una reducción en el número o función de los canales de sodio (NA +) que conducen a una corriente de sodio reducida (NA +), que determina un patrón de ECG característico, mientras que la mayoría de los pacientes se mantienen asintomáticos.
Se ha demostrado que se desenmascara en personas sospechosas y está influenciado por varios factores externos, incluidos los desequilibrios de electrolitos, el tono vagal, la fiebre y drogas.
Se han informado varios casos de BR con condiciones febriles, que incluyen procesos infecciosos y en causas no infecciosas. Recientemente, se ha informado que varios casos se han asociado con fiebre de la enfermedad de Coronavirus 2019 (COVID-19).
El diagnóstico de BRS se realiza mediante una presentación típica de ECG espontánea o una prueba de provocación de fármacos utilizando un bloqueador de canales de sodio.
La primera línea de manejo para el BRS sigue siendo un cardiodesfibrilador implantable (CDI), y otras modalidades, como la ablación de radiofrecuencia, han demostrado ser efectivas en pacientes con contraindicaciones para el implante de estos dispositivos.
Se dice que los pacientes asintomáticos o aquellos con eztrasñistoles ventriculares o taquicardia ventricular no sostenida con hallazgos iéntípicos de ECG tienen un patrón de Brugada.
En contraste, los pacientes con hallazgos de ECG característicos que han experimentado MS o taquicardia ventricular sostenida tienen también BRS. Esta revisión se centra en la presentación clínica, el diagnóstico, la estratificación de riesgos y wl manejo de BRS inducidos por fiebre.
La pirexia, el desequilibrio de electrolitos, la ingesta de alcohol y ciertas drogas son factores de activación comunes para arritmias fatales en pacientes con el síndrome.
La mayoría de los pacientes son asintomáticos, mientras que la forma más común de presentación que trae al paciente bajo atención médica es el síncope o la MS. Por lo tanto, los pacientes, especialmente los jóvenes, que presentan con síncope o episodio abortado de SCD con patrones típicos de EKG, deben someterse a un análisis adicional. Es esencial educarlos sobre la condición, posibles desencadenantes y la importancia de evitarlos en la medida de lo posible.
Con mutaciones genéticas SCN5A, los canales de sodio tienden a un mal funcionamiento a temperaturas más altas, siendo posible entonces desenmascarar BRS;
Por lo tanto, la fiebre debe tratarse de manera prioritaria, y los procedimientos que causan dolor que pueden aumentar el tono parasimpático deben realizarse bajo la analgesia adecuada.
El manejo de BR está enfocado en prevenir su resultado más temido, es decir, la MS en un corazón estructuralmente normal. Los desequilibrios de electrolitos, como la hipo e hipercalemia, y la hipocalcemia, deben tratarse con prontitud, y se debe prestar atención mientras se deben evitar aquellos medicamentos conocidos por causar arritmias ventriculares en estos pacientes.
El primer paso del tratamiento implica educar al paciente sobre los desencadenantes que se sabe que inducen arritmias fatales. La primera línea de gestión sigue siendo un CDI para pacientes sintomáticos que tienen un patrón de BRS en ECG y principalmente el historial 1 de paro cardíaco / MS o síncope inexplicable.
El CDI ha demostrado ser superior a la farmacoterapia y la ablación del catéter. La farmacoterapia con fármacos antiarrítmicos, como la quinidina o la amiodarona, se puede probar en pacientes con arritmia ventricular recurrente que requiere múltiples choques de CDI o en pacientes que tienen contraindicaciones para su uso (rechazo por el paciente para la implantación) y las comorbilidades significativas con una expectativa de vida reducida.
Para un paciente con COVID-19 con BRS, el paciente debe ser clasificado para la admisión hospitalaria o para la atención domiciliaria; Antes del alta, la fiebre debe controlarse agresivamente, y los pacientes hospitalizados deben ser monitoreados para el control de arritmias y su estado hemodinámico.
Los pacientes de COVID-19 pueden estar deshidratados y con desequilibrio electrolítico debido a la diarrea, los vómitos y la fiebre; el manejo de fluidos debe hacerse de manera conservadora, y se puede usar una prueba de elevación pasiva de la pierna para evaluar la capacidad de respuesta a la precarga. En los pacientes ingresados en la UCI, se recomienda controlar los niveles de péptido natriurético cerebral (BNP) y troponina y realizar una ecocardiografía para evaluar la afectación cardiaca.
Como conclusiones, los síntomas como un episodio sincopal con antecedentes recientes de fiebre podrían ser un signo de una afección subyacente potencialmente mortal, como el BrS.
La fiebre es un desencadenante potencial de arritmia cardíaca mortal, como la FV, en un paciente previamente asintomático.
Realizar una historia detallada de episodios previos de síncope y antecedentes familiares de MSC juega un papel importante en el diagnóstico y estratificación del riesgo de estos pacientes. La fiebre asociada con la pandemia de COVID-19 ha desenmascarado varios casos de BrS, y se debe realizar una clasificación de los pacientes en función de su gravedad para evitar la inutilidad médica de los centros de atención médica críticos en un paciente no crítico que puede tratarse en el hogar.
* Jain A, Yagnik K, Hussain KM, Naik S, Sharma T, Shahab A, Khilan MH. Pyrexia Unmasking Brugada Syndrome: A Literature Review. Cureus. 2022 Feb 22;14(2):e22489. doi: 10.7759/cureus.22489. PMID: 35371667; PMCID: PMC8942134.