Un grupo de autores iraníes publicó en la edición online del 14 de septiembre del BMC Cardiovascular Disorders los resultados de un estudio transversal de 356 casos realizado en su país relativos a los hallazgos electrocardiográficos de la toxicidad por metanol*.
Señalan que el metanol es un alcohol inodoro con aplicación industrial, especialmente utilizado en disolventes.
La mayoría de los episodios de intoxicación ocurren incidentalmente en niños y rara vez como un intento de suicidio. El verdadero material tóxico es el ácido fórmico, que es un metabolito del metanol en el cuerpo humano y su tiempo medio es de alrededor de 30 h.
La lenta tasa de metabolismo del ácido fórmico es la principal causa de presentación tardía de la toxicidad por metanol.
Los hallazgos clínicos son ceguera, insuficiencia renal, daño cerebral y finalmente la muerte, si la intoxicación no es tratada. Los tratamientos suelen incluir diálisis y etanol o fomepizol.
Los brotes de toxicidad por metanol, definidos como tres casos que se presentan dentro de las 72 h, se han producido cada vez más en los últimos años. Posiblemente se deban a una destilación o fermentación inadecuada de bebidas alcohólicas. Desafortunadamente, los conceptos erróneos comunes y novedosos sobre el papel protector y terapéutico del consumo de alcohol para la COVID-19 han contribuido a este problema de salud pública en Irán.
Como resultado, y dado el estado prohibido del alcohol en este país, la disponibilidad de alcohol casero, que a veces está contaminado con metanol, ha aumentado, lo que concomitantemente ha aumentado las tasas de toxicidad del metanol.
Después de la primera quincena de marzo de 2020, la Universidad de Ciencias Médicas de Shiraz (SUMS) enfrentó el brote de toxicidad por metanol, que se asoció aproximadamente con los primeros días de la pandemia de Covid-19; sin embargo, casi se desvaneció en la segunda década de abril. Las cifras informadas, así como las tasas de mortalidad y morbilidad, fueron sorprendentemente altas.
El servicio de cardiología participó en el cuidado de estos pacientes y brindó datos valiosos sobre su manejo y los hallazgos del ECG. Hasta la fecha, Jaff’s et al. estudio en nueve pacientes con toxicidad por metanol en 2014, y Sanaei-Zade et al. (2013) en 42 fueron dos estudios con los tamaños de muestra más grandes que analizaron los hallazgos del ECG atribuidos a la toxicidad del metanol.
En consecuencia, este estudio es el más grande que informa sobre los hallazgos del ECG sobre la toxicidad del metanol. Tuvo como objetivo describir los hallazgos de ECG más comunes entre pacientes intoxicicados con esta substancia y su asociación con la gravedad de aquélla.
Un total de 356 casos con toxicidad por metanol remitidos a los hospitales terciarios de la Universidad de Ciencias Médicas de Shiraz (Faghihi y Namazi) en marzo y abril de 2020. Los hallazgos clínicos de ceguera y alteración del nivel de conciencia, datos de laboratorio como gases en sangre arterial, electrolitos, y creatinina, y se recogieron los hallazgos más comunes de los ECG.
Los más frecuentemente encontrados fueron elevación del punto J (68,8%), presencia de onda U (59,2%), prolongación del QTc (53,2% en varones y 28,6% en mujeres) y QRS fragmentado (33,7%).
Un hallazgo destacado fue la presencia de infarto de miocardio en el 5,3% de los casos. Este hallazgo, hasta donde sabemos, solo se ha informado en unos pocos informes de casos. El patrón de Brugada (8,1%) y la onda de Osborn (3,7%) fueron los otros hallazgos interesantes.
En el análisis multivariado, cuando se ajustaron los factores de confusión, el infarto de miocardio, las alteraciones de la conducción auriculoventricular, la taquicardia sinusal y el QTC prolongado> 500 msegundos fueron cuatro factores independientes correlacionados con la gravedad de la toxicidad del metanol medida con el PH en sangre arterial en las mediciones de gases en sangre arterial, con razones de probabilidad de 12,82, 4,46, 2,32 y 3,15 (P <0,05 para todos), respectivamente.
En conclusión las variaciones electrocardiográficas durante la intoxicación por metanol son notables y están bien correlacionadas con la gravedad de la misma. El infarto de miocardio fue un hallazgo grave y preocupante en esta muestra, que debe descartarse en estos casos.
* Nikoo MH, Arjangzadeh A, Pakfetrat M, Boogar SS, Mohammadkarimi V, Ostovan VR, Khodamoradi Z, Roozbeh J, Khalili M, Shirazi FKH, Kouhi P, Heydari ST. Electrocardiographic findings of methanol toxicity: a cross-sectional study of 356 cases in Iran. BMC Cardiovasc Disord. 2020 Sep 14;20(1):415. doi: 10.1186/s12872-020-01691-y. PMID: 32928149; PMCID: PMC7488223.