24.11.2019

Pacientes portadores de dispositivos implantables y peligro de los automóviles electrónicos

En una publicación de consulta no habitual por parte de los profesionales del área de la Salud, el Technology and Health Care, órgano oficial de la European Society  for Engineering and Medicine del 8 de noviembre, autores alemanes y neozelandeses publicaron los resultados de su estudio observacional que concluyó que los pacientes con marcapasos o cardiodesfibriladores no necesitan preocuparse por conducir o ser pasajeros de automóviles electrónicos*.

Introduciendo el tema recuerdan que los dispositivos electrónicos implantables cardíacos (CIED por sus siglas en inglés), como los marcapasos permanentes (PM), los desfibriladores automáticos implantables (DAI) y los dispositivos de terapia de resincronización cardíaca (TRC) son indicaciones estándar para el tratamiento de ciertas bradicardias, taquicardias e insuficiencia cardíaca de tal manera que su prevalencia está aumentando.

Asimismo, por otro lado la exposición a los campos electromagnéticos generados por los equipos eléctricos cotidianos es omnipresente; por ejemplo, equipos de comunicación y de oficina (por ejemplo, teléfonos celulares), electrodomésticos (por ejemplo, lavadoras, lavavajillas), herramientas eléctricas y máquinas industriales (por ejemplo, equipos de soldadura) y dispositivos de seguridad (por ejemplo, detectores de metales)

Los estudios in vitro demuestran la posibilidad de que los campos electromagnéticos generados por dispositivos electrónicos de diferente tipo sean detectados por los CIED y se atribuyan erróneamente a las señales intracardíacas intrínsecas. 

Esta interferencia electromagnética (EMI por sus siglas en inglés) puede afectar la función CIED; resultando en inhibición de estimulación, administración inadecuada de terapia antitaquicardia (debido a sobredetección) o cambios en los parámetros CIED programados. 

Los fabricantes son conscientes de los riesgos potenciales y, además de proporcionar educación al paciente, mitigan el riesgo de EMI a través de algoritmos mejorados de detección de ruido, blindaje y filtros para frecuencias problemáticas. De  esta manera, los eventos adversos son poco frecuentes, pero aún ocurren.

Los autos eléctricos son una fuente emergente potencial de EMI. La popularidad de los autos eléctricos ha crecido y se pronostica que el crecimiento continuará ayudado por una mayor eficiencia de combustible e incentivos para operar vehículos con bajas emisiones. 

Por lo tanto, un número creciente de pacientes estará expuesto a EMI a través de vehículos privados y transporte público. Sin embargo, no hay datos sobre la seguridad de los automóviles eléctricos para pacientes con CIED, ni hay evidencia de si se requieren restricciones por parte de ellos. 

Los fabricantes de dispositivos recomiendan que los pacientes con CIED mantengan una distancia de al menos 30 cm de los sistemas de encendido del motor y los motores eléctricos de las embarcaciones. 

Los motores de los automóviles eléctricos modernos tienen salidas significativamente mayores que los sistemas de encendido promedio (60–310 kW versus 1–2 kW, respectivamente); sin embargo, no hay recomendaciones específicas para el uso de automóviles eléctricos.

El potencial de EMI aumenta con la fuerza del campo electromagnético, que es proporcional a la potencia del motor eléctrico. Para evaluar este riesgo potencial, los autores realizaron una evaluación in vivo de la función CIED durante la exposición a la conducción y la carga de los cuatro automóviles eléctricos más populares en Europa.

Los resultados principales de este estudio se han publicado previamente como un breve informe de investigación en Annals of Internal Medicine, pero los detalles metodológicos y las características específicas de los dispositivos y los electrodos se informan en el estudio que se comenta.

Fue un estudio prospectivo, de corte transversal, diseñado para evaluar el riesgo EMI de los autos eléctricos en la función CIED.

Ciento ocho pacientes consecutivos con CIED que se presentaron para un seguimiento de rutina entre mayo de 2014 y enero de 2015 se inscribieron en el estudio. 

Los participantes estuvieron expuestos a campos electromagnéticos generados por los cuatro autos eléctricos más comunes (Nissan Leaf, Tesla Model S, BMW i3, VW eUp) mientras conducían pruebas de banco en el Instituto de Tecnología Automotriz, Departamento de Ingeniería Mecánica, Universidad Técnica, Munich. 

El punto final primario fue cualquier anormalidad en la función CIED (p. Ej., Sobredetección con inhibición de estimulación, terapia inapropiada o cambio de modo) mientras conducían o cargaban automóviles eléctricos según lo evaluado por las grabaciones electrocardiográficas y la interrogación del dispositivo.

No se observó ningún cambio en la función o programación del dispositivo en esta cohorte que es representativa de los dispositivos CIED contemporáneos. El mayor campo electromagnético detectado fue a lo largo del cable de carga durante la carga de alta corriente (116.5 μT). La intensidad de campo en la cabina fue menor (2.1-3.6 μT).

Como conclusiones, los investigadores refieren  que efectivamente los autos eléctricos producen campos electromagnéticos; sin embargo, no afectaron la función o programación CIED en esta cohorte por lo cual es probable que conducir y cargar automóviles eléctricos sea seguro para los pacientes con CIED.

* Carsten Lennerz, Lorenz Horlbeck, Severin Weigand, Christian Grebmer, Patrick Blazek, Amir Brkic, Verena Semmler, Bernhard Haller, Tilko Reents, Gabriele Hessling, Isabel Deisenhofer, Markus Lienkamp, Christof Kolb, Matthew O’Connor. Patients With Pacemakers or Defibrillators Do Not Need to Worry About e-Cars: An Observational Study. Technol Health Care 2019 Nov 8 [Online ahead of print]

Auspicios Institucionales
  • Sociedad Argentina de Cardiología
  • Federación Argentina de Cardiología
  • SIAC
  • SADEC
  • Asociación Argentina de Cardiología
  • Latin American Heart Rhythm Society
  • Fundación Barceló - Facultad de Medicina