Los edones se incorporan a CARDIOLATINA

Julio, ¿a qué fiera Antandro se parece,
que porque no se envidia no se infama,
y porque no se ve no se aborrece?

Por convidado un sátiro tenía

Lope de Vega

Anteriormente se denominada Edonis, porque fue habitada por la tribu tracia o cimeria de los edones.

Tal fue el destino de Antandro, ciudad a la que canta Lope de Vega.

Heródoto la llama «localidad de los pelasgos», en su relato de la marcha de las tropas del rey persa Jerjes I por el noroeste de Anatolia.

Es a Julio, la persona, a quién pregunta el autor de Fuente Ovejuna.

¡No!, es al mes al que queremos distinguir en este Editorial; aquel en cuyo primer día muere el anarquista Bakunin y se suicida Leandro N. Alem, el jurista fundador de la que otrora fuera la Unión Cívica, o de la muerte de Rousseau, el autor Del contrato Social o del suicidio del novelista Ernest Hemingway o en el que nace el compositor Aníbal Troilo, admirado por Mauricio Rosenbaum que describiera el “efecto fuelle” o mejor “efecto Troilo” en el ECG.

En julio destacamos el día 9, en el que celebramos la Independencia de Argentina y el 20, que es el Día del amigo, en honor a todos quienes participamos de Cardiolatina, que más allá de ser colegas que compartimos distintas actividades académicas, nos hemos ido conformando como un verdadero grupo de amigos.

También en julio tienen lugar algunas extrañas efemérides, entre ellos, el día mundial del bikini (5 de julio), el día mundial de ir desnudo (14 de julio), día mundial de sacar la lengua (19 de julio), y hasta día mundial de la comida rápida (21 de julio).

En CARDIOLATINA se inicia esta segunda mitad del año con expectativas en las actividades habituales: la DISCUSIÓN DE CASOS, las SESIONES DE IMÁGENES y el intercambio de opiniones sobre temas teóricos y bibliografía en el Grupo Educacional, de Telegram, mientras se avanza en la organización del 21º Encuentro del FIAI durante el CONGRESO DE ARRITMIAS.

Y si lo meramente académico en el área cardiológica no es suficiente, siempre hay espacio para leer algún poema paraguayo que comparte el colega Luciano Pereira.

¡A caminar por el mes de julio, entonces!

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